En Avignon, la sucesión de la alcaldesa socialista Cécile Helle, que no busca un tercer mandato, ha despertado ambiciones de siete candidatos que van desde el PS hasta los Républicains. La campaña para las elecciones municipales del 15 y 22 de marzo de 2026 está marcada por una inestabilidad total. El Rassemblement national y La France insoumise ya han delineado estrategias claras.
Avignon, la capital de Vaucluse, sirve como un modelo en miniatura de la situación política nacional debido a la inestabilidad en la campaña municipal de 2026. La alcaldesa socialista saliente Cécile Helle anunció en febrero que no buscaría un tercer mandato consecutivo en las elecciones programadas para el 15 y 22 de marzo de 2026. Elegida en 2014 al arrebatar la ciudad a la derecha, deja un campo completamente abierto.
A cinco meses de la votación, siete candidatos compiten por su sucesión, abarcando un espectro electoral desde el Parti socialiste (PS) hasta los Républicains (LR). Algunos ya han lanzado oficialmente sus campañas, como el experiodista Olivier Galzi, de 53 años, que se presenta como independiente, o Joël Peyre, de 67 años, el actual adjunto de finanzas y miembro del Parti radical de gauche (PRG). Otros, como Julien Aubert, de 47 años, vicepresidente nacional de los LR, aún están evaluando la oportunidad de entrar en este complejo caos político.
Solo las estrategias del Rassemblement national (RN) y La France insoumise (LFI) destacan con claridad hasta ahora, mientras que las ambiciones de otros partidos se multiplican en un contexto de incertidumbre.