Insee informó de un aumento del 0,5 % en el PIB francés para el tercer trimestre de 2025, superando las previsiones. Esto sitúa a Francia en camino de un crecimiento anual superior al 0,7 %. El ministro de Economía, Roland Lescure, calificó el rendimiento de 'notable' en medio de incertidumbres políticas.
De julio a septiembre de 2025, el producto interior bruto (PIB) francés aumentó un 0,5 % en comparación con el trimestre anterior, según el Instituto Nacional de Estadística y Estudios Económicos (Insee), que había previsto un 0,3 %. Anunciada el 30 de octubre, esta cifra supera las expectativas y eleva el crecimiento acumulado al 0,8 % a finales de septiembre, lo que podría superar el objetivo del gobierno del 0,7 % para el año.
El consumo de los hogares se mantuvo estable, con una caída en los alimentos compensada por un repunte en la energía y un gasto acelerado en bienes manufacturados. La economía se benefició de una recuperación en la aeronáutica, particularmente por el aumento de las entregas de Airbus en septiembre, vista como una tendencia duradera por el economista de BNP Paribas Stéphane Colliac, que podría añadir entre 0,3 y 0,4 puntos porcentuales de crecimiento en un año completo. Otro motor es el aumento de los esfuerzos en defensa ante la amenaza rusa.
El ministro de Economía, Roland Lescure, elogió 'un rendimiento notable', añadiendo: 'A pesar de la turbulencia política y las incertidumbres internacionales, nuestras empresas invierten, exportan y avanzan el país.' Enfatizó la necesidad de un presupuesto rápido: 'La adopción rápida de un presupuesto que preserve la confianza de las empresas y los hogares será clave para mantener este impulso.'
En comparación con los vecinos, Francia supera a Alemania, que repuntó un 0,1 % tras una caída del 0,2 %, mientras que España registró un 0,6 % y aspira a un 2,7 % anual. Los recortes de tipos del Banco Central Europeo apoyan la inversión de los hogares, especialmente en vivienda, a medida que se recupera la inversión empresarial. Sin embargo, la incertidumbre política ha llevado a rebajas en la calificación soberana por parte de S&P y Fitch, y a una perspectiva negativa de Moody’s. El gobernador del Banque de France, François Villeroy de Galhau, advierte de un riesgo de 'asfixia progresiva' para el país.