Una reciente columna en The Guardian Nigeria presenta diversas reacciones de lectores al discurso en curso del poeta Niyi Osundare sobre el estado de las universidades nigerianas. Los colaboradores elogian las perspectivas de Osundare mientras debaten los desafíos internos y externos que enfrenta la educación superior. Piden mayor financiación, salarios justos para los profesores y reformas sistémicas para restaurar la integridad.
La columna de Tony Afejuku, publicada el 31 de octubre de 2025, pausa su serie sobre Niyi Osundare para compartir respuestas seleccionadas de lectores a las críticas del poeta-erudito sobre las universidades nigerianas. Osundare, descrito como una figura «audaz y aventurera», ha destacado problemas como la atrofia moral, la extorsión y la falta de dirección en la academia durante cinco semanas de discurso.
El profesor OO expresa anticipación por la influencia de Osundare, previniendo «llantos y lamentos de Nueva Orleans» y esperando «Risas pendientes» en las universidades en medio de la «Niebla» de los desafíos. Critica a las «mentes académicamente débiles» que supuestamente pagan por títulos y defiende las celebraciones en las defensas como reconocimiento de logros, instando a los administradores a financiar tales eventos dada las tarifas de defensa.
El Dr. Clement Odia aprecia la diversidad de la columna, pero sugiere que Osundare proporcione perspectivas sobre universidades extranjeras para equilibrar. Atribuye los males universitarios a presiones económicas en lugar de fallos morales, enfatizando que «nadie sirve efectivamente con el estómago vacío» y llamando al gobierno a priorizar la remuneración de los profesores.
El Dr. Albert O. Onobhayedo usa analogías bíblicas para culpar a la «senilidad», la codicia y la credulidad por la podredumbre, advirtiendo de una luz que se desvanece y haciendo eco del llamado de Osundare a decidir el futuro del sistema.
El capitán Jonathan Nani está de acuerdo con Afejuku y Osundare, notando que las universidades carecen de dirección a pesar del intelecto. Exhorta al gobierno y la academia a restaurar el propósito, la integridad y la unidad para evitar que el sistema derive.
Un periodista de investigación anónimo, tras revisar las entrevistas de Osundare, identifica «enemigos internos y externos» que desvían fondos, refiriéndose a una conferencia de 1997 sobre recuperar la gloria universitaria. Critica el enfoque en amenazas externas y espera que el ministro de Educación use el análisis como una hoja de ruta hacia adelante.
Otros colaboradores, como otro prof. OO y The Stirrer, elogian el estilo suspensivo y predicen luchas continuas con ASUU y negociadores, llamando a la «magia» de Osundare para sanar heridas.
Las respuestas subrayan un consenso sobre fallos sistémicos mientras debaten soluciones, desde defectos en los programas de escritura creativa hasta la necesidad de una defensa interminable.