Científicos simulan tormentas inducidas por incendios forestales en modelos climáticos
Los investigadores han logrado un avance al recrear tormentas inducidas por incendios forestales, conocidas como nubes pirocumulonimbus, en modelos de sistemas terrestres por primera vez. Esta simulación captura cómo los incendios forestales intensos generan un clima severo que puede propagar los incendios más lejos. El trabajo mejora la comprensión de las interacciones fuego-atmósfera en medio de condiciones climáticas empeorantes.
Un equipo de científicos, liderado por investigadores de la Universidad de Nueva Gales del Sur (UNSW) en Australia, ha modelado con éxito la formación de nubes pirocumulonimbus (pyroCb) en modelos globales de sistemas terrestres. Estas tormentas surgen de incendios forestales extremos y pueden impulsar el humo alto en la estratosfera, influyendo en los patrones climáticos y la calidad del aire mucho más allá de la zona del incendio. El estudio, publicado en Nature Climate Change en octubre de 2023, marca la primera vez que tales eventos se han resuelto en estos modelos complejos, que previamente carecían del detalle necesario debido a limitaciones computacionales.
El avance se centra en simular eventos del mundo real, incluyendo los devastadores incendios forestales australianos de 2019-2020. Durante esos incendios, se formaron pyroCbs sobre paisajes en llamas, generando sus propias tormentas y elevando aerosoles a la atmósfera superior. "Este es un paso significativo hacia adelante porque nos permite explorar cómo estas tormentas generadas por incendios contribuyen a la propagación de incendios a larga distancia y retroalimentaciones climáticas globales", dijo la autora principal, la Dra. Sophie Ottmar de UNSW. Los modelos demuestran que el calor intenso de los incendios forestales impulsa corrientes ascendentes lo suficientemente fuertes como para formar nubes cumulonimbus, que luego producen rayos que encienden nuevos incendios a kilómetros de distancia.
Históricamente, las pyroCbs eran difíciles de simular porque los modelos de sistemas terrestres operan a resoluciones gruesas, a menudo omitiendo las dinámicas a escala fina de las columnas de humo de los incendios. Al incorporar módulos de mayor resolución y acoplar las emisiones de incendios con procesos atmosféricos, el equipo superó estos desafíos. La investigación destaca la frecuencia creciente de tales eventos bajo el cambio climático, con observaciones que muestran un aumento en las ocurrencias de pyroCb desde la década de 2010.
Este avance tiene implicaciones para la gestión de incendios y la predicción climática. Permite una mejor previsión de la dispersión de humo y sus efectos radiativos, que pueden enfriar temporalmente el planeta al bloquear la luz solar. El coautor, el profesor Andrew Pitman, señaló: "Entender las pyroCbs es crucial a medida que los incendios forestales se intensifican; nuestros modelos ahora pueden informar políticas sobre reducciones de emisiones y respuestas de emergencia." Aunque el estudio valida las simulaciones contra datos satelitales de incendios pasados, subraya la necesidad de refinamientos continuos para capturar variaciones regionales.
En general, el trabajo cierra brechas en la ciencia climática, proporcionando herramientas para evaluar cómo el calentamiento inducido por el hombre exacerba los extremos de incendios. A medida que los incendios forestales se vuelven más severos, estos modelos ofrecen una lente vital para anticipar riesgos ambientales.