El cierre del gobierno de EE.UU. llega al cuarto día con costos económicos en aumento

El gobierno federal de EE.UU. está en su cuarto día de cierre debido a negociaciones presupuestarias estancadas, afectando parques nacionales, trabajadores federales y servicios en todo el país. El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, destacó el impacto financiero, estimando costos de 1.200 millones de dólares para pagar a empleados no trabajadores. Las perspectivas de un acuerdo siguen inciertas a medida que persisten las divisiones partidistas.
El cierre parcial del gobierno de EE.UU. comenzó el 1 de octubre de 2025, desencadenado por desacuerdos sobre el gasto federal y las prioridades presupuestarias entre demócratas y republicanos. Para el 4 de octubre, el impasse había provocado interrupciones generalizadas, incluyendo cierres en parques nacionales y licencias para cientos de miles de empleados federales.
Los parques nacionales, gestionados por el Servicio de Parques Nacionales, enfrentaron impactos inmediatos. Los centros de visitantes cerraron y el personal esencial se redujo a niveles mínimos para seguridad y protección. 'Estamos viendo familias rechazadas en las entradas, incapaces de disfrutar estos tesoros públicos', dijo un funcionario del parque en una entrevista con NPR, enfatizando el efecto del cierre en el turismo y las economías locales.
Los trabajadores federales soportaron la mayor parte de la incertidumbre. Surgieron informes de amenazas de despido para empleados que rechazan trabajar sin pago durante el cierre. 'Esto no se trata solo de pago; se trata de la seguridad laboral para servidores públicos dedicados', señaló un trabajador federal anónimo citado en la cobertura de las tensiones laborales. El personal esencial, como el de control de tráfico aéreo y seguridad fronteriza, continuó las operaciones, pero el personal no esencial fue enviado a casa sin pago.
Económicamente, los costos del cierre ya eran significativos. El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, declaró el 4 de octubre que había costado a los contribuyentes 1.200 millones de dólares solo para pagar a empleados federales que no estaban trabajando. Esta cifra tiene en cuenta las obligaciones de pago retroactivo que deben cumplirse una vez que termine el cierre, basándose en precedentes de cierres anteriores.
Las negociaciones en el Congreso mostraron poco progreso. Los republicanos de la Cámara impulsaron recortes de gasto, mientras que los demócratas abogaron por mantener los niveles de financiamiento. No se reportaron avances importantes al final del día, dejando la duración del cierre desconocida. La situación evocaba cierres pasados, como el de 2018-2019 que duró 35 días, pero las conversaciones actuales insinuaban posibles resoluciones si se pudieran alcanzar compromisos sobre ayuda por desastres y financiamiento fronterizo.
Las implicaciones más amplias incluyeron servicios demorados como el procesamiento de pasaportes y el monitoreo ambiental. Aunque no aparecieron contradicciones directas en las estimaciones de costos entre fuentes, el enfoque permaneció en los impactos humanos e fiscales inmediatos en lugar de pronósticos a largo plazo.