Google está llevando a cabo un cambio masivo de servidores x86 a sus máquinas Axion impulsadas por Arm desarrolladas internamente. Este ambicioso proyecto implica adaptar cargas de trabajo internas para las mayores empresas del mundo. Alrededor de 30.000 aplicaciones ya han sido convertidas con éxito a sistemas Arm.
La iniciativa de Google representa una apuesta significativa en la migración de hardware, apodada un 'riesgo de mil millones de líneas' debido a la escala del código involucrado. La compañía busca reemplazar cada servidor x86 con máquinas Axion impulsadas por Arm, centrándose en optimizar las cargas de trabajo internas.
Esta carrera destaca los desafíos que enfrenta la gran tecnología al transitar a nuevas arquitecturas de hardware. Clave en el proceso es adaptar las aplicaciones para garantizar compatibilidad y rendimiento en sistemas Arm.
Según las últimas actualizaciones, aproximadamente 30.000 aplicaciones han sido convertidas con éxito, demostrando avances en este complejo empeño. El movimiento subraya la inversión de Google en silicio personalizado para mejorar la eficiencia y reducir la dependencia de los procesadores x86 tradicionales.