El Consejo de Seguridad de la ONU impone sanciones a Irán
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha votado para imponer nuevas sanciones a Irán por su programa nuclear. La resolución fue aprobada con un fuerte apoyo en medio de preocupaciones sobre los niveles de enriquecimiento de uranio. Esto marca una escalada significativa en la presión internacional sobre Teherán.
El 28 de septiembre de 2025, el Consejo de Seguridad de la ONU adoptó la Resolución 2789, restableciendo sanciones contra Irán por incumplimiento del Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA, por sus siglas en inglés). La votación fue de 13 a favor, con Rusia y China absteniéndose, según informes de NPR. Las medidas se dirigen al programa de misiles balísticos de Irán y a sus actividades de enriquecimiento de uranio, que la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) reportó recientemente habían alcanzado un 60% de pureza, cerca de niveles aptos para armas.
La resolución fue presentada por Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania. La embajadora de EE.UU. ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, declaró: "La continua defiance de Irán representa una grave amenaza para la estabilidad regional y los esfuerzos globales de no proliferación." Enfatizó que las sanciones incluyen congelamientos de activos en entidades vinculadas a la cadena de suministro nuclear de Irán y prohibiciones de viaje para funcionarios clave.
El contexto de fondo se remonta al JCPOA de 2015, bajo el cual Irán acordó limitar sus actividades nucleares a cambio de alivio de sanciones. Sin embargo, la retirada de EE.UU. en 2018 bajo el presidente Trump llevó a Irán a incumplir gradualmente los límites del acuerdo. Inspecciones recientes de la AIEA en septiembre de 2025 revelaron que Irán posee más de 140 kilogramos de uranio enriquecido al 60%, suficiente para varias armas nucleares si se procesa ulteriormente, aunque Irán niega perseguir armamento.
El embajador de Irán ante la ONU, Amir Saeid Iravani, condenó la resolución, llamándola "motivada políticamente e injusta." Argumentó: "Estas sanciones solo fortalecerán la determinación de Irán para defender sus derechos soberanos bajo el Tratado de No Proliferación Nuclear." Rusia y China, aliados de larga data, se abstuvieron citando la necesidad de diplomacia, con el representante chino señalando: "Las presiones unilaterales socavan las soluciones multilaterales."
Las implicaciones podrían repercutir en los mercados globales de energía, ya que Irán es un importante productor de petróleo. Analistas sugieren que las sanciones pueden endurecer el control sobre las exportaciones de Irán, potencialmente elevando los precios del petróleo. Las naciones europeas expresaron esperanza por nuevas conversaciones, pero Teherán ha mostrado poca disposición a volver a las negociaciones sin un alivio total de sanciones.
Esta acción revive los mecanismos de snapback del JCPOA, permitiendo la reimposición rápida de penalizaciones previas a 2015. No se anticipa una respuesta militar inmediata, pero aumenta las tensiones en Oriente Medio en medio de conflictos en curso.