El mercado inmobiliario de Buenos Aires mostró un fuerte repunte en septiembre, con casi 7.000 escrituras, uno de los tres mejores meses de los últimos 10 años. Expertos destacan el rol de los créditos hipotecarios y la estabilidad del sector ante la incertidumbre económica. Desarrolladores ven oportunidades en precios bajos y la doble función de las propiedades como inversión y refugio.
En una entrevista con Canal E, Magdalena Tato, presidenta del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, analizó el crecimiento sostenido del mercado inmobiliario. "Septiembre reflejó un alza: seguimos creciendo mes a mes en la cantidad de escrituras", con un total de 6.998 operaciones, casi 7.000, calificándolo como "uno de los tres mejores septiembres" de los últimos años. Aunque no alcanza los picos de 2017-2018, Tato señaló que "hoy estamos en casi un 20% del total de las escrituras con crédito hipotecario", una cifra alentadora.
La dirigente explicó que la falta de liquidez aún no impacta las operaciones escrituradas, ya que "esos créditos aún no se acordaron". El interés público persiste, pero es un tema financiero, especialmente en períodos electorales con retraimiento de compradores. Tato se mostró optimista: "Nosotros creemos que van a seguir creciendo. Este es el mejor septiembre de los últimos 10 años". Octubre avanza favorablemente y diciembre promete actividad alta por cierres fiscales y fideicomisos, donde una compraventa inicial genera "dos o tres operaciones más en la cadena".
Por su parte, Juan Manuel Tapiola, desarrollador y fundador de Espacios, enfatizó la estabilidad del real estate. "El Real Estate es el activo más estable y menos volátil", afirmó, destacando que "hoy estamos entrando en precios bajos para Argentina". La inflación de inmuebles fue del 20%, versus 200% en supermercados, y el metro cuadrado se compra al costo de construcción. Esto ofrece rentabilidad de 10-20% anual entre alquiler (5-7%) y suba de precios. Tapiola notó demanda de venezolanos y ex inversores en criptomonedas, con riesgos ligados a elecciones: victoria opositora elevaría el riesgo país y frenaría créditos, mientras un triunfo oficialista los impulsaría.
Ambos expertos coinciden en el potencial del sector como refugio tangible en contextos volátiles.