Nuevo material aumenta la densidad energética de las baterías en un 50 por ciento
Científicos de la Universidad de California han presentado un material innovador que mejora el rendimiento de las baterías de iones de litio. La innovación promete extender significativamente el alcance de los vehículos eléctricos y los dispositivos portátiles. Los detalles se publicaron en la revista Nature el 30 de septiembre de 2025.
En un estudio publicado hoy, investigadores de la Universidad de California, Berkeley, anunciaron el desarrollo de un nuevo material para el cátodo de baterías de iones de litio. Este material, compuesto por una estructura modificada de óxido de níquel-manganeso-cobalto, logra un aumento del 50 por ciento en la densidad energética en comparación con las baterías convencionales. El avance aborda limitaciones clave en la tecnología actual de baterías, como la capacidad limitada y los tiempos de carga más lentos.
El equipo de investigación, liderado por la Dra. Elena Ramírez, comenzó a trabajar en el proyecto hace tres años, enfocándose en técnicas de nanoestructuración para estabilizar el material durante los ciclos de carga y descarga. 'Esto podría revolucionar la forma en que alimentamos nuestra vida diaria, haciendo que el almacenamiento de energía sostenible sea más eficiente y accesible', declaró la Dra. Ramírez en el comunicado de prensa del estudio. El material mantiene su estabilidad durante más de 1.000 ciclos con menos del 5 por ciento de degradación de capacidad, una mejora notable sobre las opciones existentes.
Pruebas realizadas en el laboratorio de materiales avanzados de la universidad demostraron el potencial de la batería para aplicaciones en el mundo real. Por ejemplo, podría permitir que los vehículos eléctricos recorran hasta 500 millas con una sola carga, en comparación con el promedio actual de alrededor de 300 millas. El estudio, financiado por una subvención de 2 millones de dólares de la National Science Foundation, fue revisado por pares y publicado en Nature, destacando su rigor científico.
Aunque el material muestra promesa, los investigadores señalan que escalar la producción para uso comercial requerirá más inversión en procesos de fabricación. No se proporcionó un cronograma inmediato de comercialización, pero colaboradores de la industria expresaron interés en pruebas piloto. Este desarrollo se alinea con los esfuerzos globales para acelerar la transición a fuentes de energía renovable en medio de las preocupaciones por el cambio climático.
El anuncio llega en un momento en que la demanda de baterías está aumentando, con ventas de vehículos eléctricos proyectadas para alcanzar 40 millones de unidades anuales para 2030, según informes de la industria. Al mejorar la densidad energética sin aumentar el tamaño o el peso de la batería, esta innovación podría reducir la dependencia de minerales de tierras raras y bajar los costos para los consumidores.