Nuevos estudios revelan que preservar los ganglios linfáticos durante la cirugía de cáncer podría mejorar las respuestas de los pacientes a la inmunoterapia al apoyar células inmunes clave. Liderada por el Instituto Peter Doherty, la investigación enfatiza la función crucial de los ganglios linfáticos en entrenar a las células T para combatir tumores. Los hallazgos, publicados en Nature Immunology, sugieren repensar las prácticas quirúrgicas para aumentar la efectividad del tratamiento.
Un equipo del Instituto Peter Doherty para Infecciones e Inmunidad ha publicado dos artículos en Nature Immunology que detallan cómo los ganglios linfáticos orquestan respuestas inmunes contra el cáncer y infecciones crónicas. La investigación demuestra que los ganglios linfáticos proporcionan un entorno óptimo para que las células T similares a tallos sobrevivan, se multipliquen y produzcan células T 'asesinas' que atacan tumores, a diferencia de otros órganos como el bazo.
El profesor Axel Kallies, jefe de laboratorio en el Instituto Doherty y autor principal de ambos estudios, explicó las implicaciones para el tratamiento del cáncer. 'Los ganglios linfáticos no son solo salas de espera pasivas para las células inmunes, entrenan activamente y educan a las células T, y las envían a realizar su trabajo', dijo. Agregó que remover los ganglios linfáticos —un procedimiento estándar para prevenir la propagación del tumor— puede reducir la efectividad de terapias como el bloqueo de puntos de control y tratamientos con células T CAR. 'Preservar los ganglios linfáticos podría fortalecer las respuestas inmunes y aumentar la efectividad de la inmunoterapia.'
Los estudios también exploran por qué los resultados de la inmunoterapia varían entre pacientes, vinculándolo a la condición y función de los ganglios linfáticos en la generación de células T que combaten el cáncer. El Dr. Carlson Tsui, investigador postdoctoral en la Universidad de Melbourne y primer autor de uno de los artículos, señaló: 'Nuestra investigación identifica señales moleculares involucradas en la regulación de células similares a tallos y en su capacidad para producir células asesinas efectivas. Estos hallazgos podrían guiar el desarrollo y refinamiento de tratamientos basados en el sistema inmune para el cáncer y la infección crónica.' Abogó por terapias que preserven y mejoren la función de los ganglios linfáticos para potenciar las defensas naturales del cuerpo.
Realizado utilizando modelos animales, el trabajo fue una colaboración que involucró instituciones como el Hospital Universitario de Bonn, WEHI y ETH Zürich, financiado por entidades incluyendo el Consejo Nacional de Salud e Investigación Médica de Australia. La profesora Shahneen Sandhu del Centro de Cáncer Peter MacCallum destacó la posible traducción clínica: 'Aunque esta investigación se realizó en el laboratorio con modelos preclínicos, estamos emocionados de estudiar estos hallazgos en muestras clínicas de pacientes que reciben inhibidores de puntos de control inmunes, como parte de una colaboración en curso con Melanoma Research Victoria y el profesor Kallies.'
Los artículos, publicados en 2025, ofrecen insights que podrían informar estrategias futuras para la inmunoterapia y el manejo de infecciones crónicas.