El crecimiento de la IA plantea un desafío laboral para la Reserva Federal
David Zervos, estratega jefe de mercados en Jefferies, advierte que los rápidos avances en inteligencia artificial podrían crear disrupciones significativas en el empleo. Este desarrollo podría complicar los esfuerzos de la Reserva Federal para mantener el empleo máximo. Estas ideas surgen en medio de la adopción acelerada de la IA en diversas industrias.
David Zervos, el estratega jefe de mercados en Jefferies, destacó el impacto de doble filo potencial de la inteligencia artificial en la economía de EE.UU. durante una discusión reciente. Describió el crecimiento de la IA como 'espectacular', prediciendo que transformará la productividad pero también provocará un 'serio problema de empleo' para la Reserva Federal.
La Reserva Federal opera bajo un doble mandato para promover el empleo máximo y precios estables. Zervos argumentó que la automatización impulsada por IA podría llevar a un desplazamiento laboral generalizado, particularmente en sectores que dependen de tareas rutinarias como la manufactura, el servicio al cliente y el procesamiento de datos. 'El crecimiento de la IA va a ser espectacular, pero va a crear un serio problema de empleo para la Fed', declaró Zervos, enfatizando cómo estos cambios podrían obligar al banco central a ajustar las políticas de tasas de interés de manera más agresiva para contrarrestar el aumento del desempleo.
El contexto de fondo revela que las tecnologías de IA, incluyendo modelos de lenguaje grandes y sistemas de aprendizaje automático, han experimentado un progreso exponencial desde 2023. Empresas como OpenAI y Google han lanzado herramientas que automatizan trabajos cognitivos complejos, acelerando las tasas de adopción. Zervos señaló que, aunque la IA podría impulsar la producción económica general al mejorar la eficiencia, el período de transición podría resultar en desempleo estructural, donde las habilidades de los trabajadores se vuelven obsoletas más rápido de lo que surgen nuevas oportunidades.
Desde una perspectiva de política monetaria, la Fed ha respondido históricamente a la debilidad del mercado laboral con recortes de tasas para estimular la contratación. Sin embargo, si las pérdidas de empleo inducidas por IA ocurren de manera desigual en regiones y demografías, podría complicar las decisiones basadas en datos de la Fed. Zervos sugirió que los responsables de políticas podrían necesitar monitorear más de cerca los efectos laborales de la IA, potencialmente integrándolos en las previsiones económicas junto con indicadores tradicionales como los informes de nóminas.
Las opiniones equilibradas reconocen los beneficios potenciales de la IA, como la creación de empleos de alta cualificación en tecnología y campos relacionados. Sin embargo, Zervos advirtió que sin intervenciones dirigidas como programas de reconversión, el efecto neto podría inclinarse hacia la disrupción. Sus comentarios subrayan debates más amplios sobre cómo los bancos centrales se adaptan a las revoluciones tecnológicas, trazando paralelos con cambios pasados como la revolución industrial o la informatización en la década de 1980.
En general, el análisis de Zervos apunta a un desafío pivotal para la Fed en equilibrar el crecimiento impulsado por la innovación con la estabilidad del empleo en una era de IA.