Ex CEO de Google financia barcos autónomos para la exploración antártica
Eric Schmidt, el ex CEO de Google, ha anunciado financiamiento para un proyecto que despliega drones de barco autónomos para navegar las aguas traicioneras del mar de Amundsen en la Antártida. La iniciativa, en asociación con Saildrone, busca mapear el fondo marino y recopilar datos sobre corrientes oceánicas en medio de preocupaciones por el cambio climático. Este esfuerzo se basa en el interés continuo de Schmidt en la exploración oceánica.
Eric Schmidt, quien fue CEO de Google desde 2001 hasta 2011 y luego su presidente ejecutivo, está proporcionando respaldo financiero para una ambiciosa expedición a una de las regiones más inhóspitas del planeta. El proyecto implica desplegar vehículos de superficie no tripulados (USV) de Saildrone, también conocidos como drones de barco, para explorar el mar de Amundsen en la Antártida occidental. Esta área es notoria por su clima extremo, icebergs masivos y olas imponentes que hacen casi imposibles los viajes tradicionales con tripulación.
Saildrone, una empresa con sede en California fundada en 2012, se especializa en estos buques autónomos impulsados por energía solar y eólica. Los USV están diseñados para operar durante meses, equipados con sensores para medir la temperatura del océano, salinidad, corrientes y condiciones atmosféricas. Para esta misión, los drones se centrarán en mapear el fondo marino, que permanece en gran parte inexplorado en el mar de Amundsen, y estudiar cómo las aguas que se calientan contribuyen al derretimiento de estanterías de hielo cercanas como el glaciar Thwaites, a menudo llamado el 'Glaciar del Día del Juicio' debido a su potencial para acelerar el aumento del nivel del mar global.
La participación de Schmidt proviene de su Instituto Schmidt del Océano, que cofundó con su esposa Wendy en 2009 para avanzar en la investigación oceanográfica. El instituto previamente financió el buque de investigación Falkor, pero este nuevo proyecto se inclina hacia la tecnología no tripulada para reducir riesgos y costos. 'El océano cubre el 70% de nuestro planeta, sin embargo sabemos menos sobre sus profundidades que sobre la superficie de la luna', dijo Schmidt en un comunicado. 'Sistemas autónomos como los de Saildrone desbloquearán datos críticos sobre el cambio climático que no podemos obtener de ninguna otra manera.'
La expedición está programada para lanzarse en los próximos años, con pruebas iniciales en aguas menos extremas para garantizar la fiabilidad de los drones. El CEO de Saildrone, Richard Jenkins, enfatizó la robustez de la tecnología: 'Nuestros vehículos ya han navegado más de 800.000 millas náuticas a través de todos los océanos, incluido el Océano Austral, demostrando que pueden manejar la furia antártica.' Esta colaboración podría proporcionar conocimientos sin precedentes sobre cómo las aguas antárticas influyen en los patrones climáticos globales, informando esfuerzos para mitigar el aumento del nivel del mar que amenaza a las comunidades costeras en todo el mundo.
Aunque la cantidad exacta de financiamiento no se ha divulgado, el proyecto se alinea con tendencias filantrópicas más amplias en el sector tecnológico donde ex ejecutivos como Schmidt invierten en ciencia ambiental. Los críticos señalan que tales iniciativas, aunque innovadoras, deben priorizar la accesibilidad de los datos para beneficiar a investigadores globales en lugar de intereses propietarios.