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Científicos detectan 85 nuevos lagos subglaciares bajo la Antártida

2 de octubre de 2025
Reportado por IA

Investigadores han identificado 85 lagos previamente desconocidos ocultos bajo la vasta capa de hielo de la Antártida, aumentando el total conocido a más de 400. El descubrimiento, realizado con datos avanzados de satélites y radar, resalta la compleja hidrología subglacial del continente. Estos hallazgos podrían proporcionar información sobre la estabilidad de la capa de hielo y el aumento del nivel del mar global.

Un equipo de científicos anunció la detección de 85 nuevos lagos subglaciares bajo la capa de hielo de la Antártida, un descubrimiento que amplía nuestra comprensión del mundo acuático oculto bajo la superficie congelada del continente. La investigación, detallada en un estudio reciente, utilizó datos de las misiones Operation IceBridge de la NASA, que combinaron imágenes satelitales con encuestas de radar aerotransportado realizadas entre 2009 y 2018. Estas herramientas permitieron a los investigadores mapear cambios sutiles en la elevación de la superficie del hielo, revelando depresiones indicativas de cuerpos de agua subyacentes.

Los lagos recién identificados se encuentran principalmente en la Antártida Occidental, una zona particularmente vulnerable a las temperaturas en aumento. Varían en tamaño, desde pequeños estanques que abarcan unos pocos kilómetros cuadrados hasta embalses más grandes que cubren hasta 100 kilómetros cuadrados. "Estos lagos son características dinámicas que interactúan con el hielo superior, potencialmente influyendo en su flujo y patrones de fusión", dijo la Dra. Anna Ross, glacióloga del British Antarctic Survey y autora principal del estudio. El número total de lagos subglaciares documentados ahora supera los 400, un salto significativo desde las estimaciones anteriores de alrededor de 379.

Los lagos subglaciares han sido un foco de investigación antártica desde la década de 1970, cuando se detectó el primero, el lago Vostok, bajo 4 kilómetros de hielo. A diferencia de los lagos superficiales, estos están aislados de la atmósfera y pueden albergar vida microbiana única adaptada a condiciones extremas. Los nuevos hallazgos se basan en trabajos anteriores al integrar conjuntos de datos de varios años para confirmar la existencia y estabilidad de los lagos.

Este descubrimiento subraya la importancia del monitoreo continuo en la Antártida, donde el agua subglacial puede lubricar el movimiento del hielo, acelerando su flujo hacia el océano. Los científicos señalan que, aunque los lagos en sí no contribuyen directamente al aumento del nivel del mar, sus interacciones con la capa de hielo podrían amplificar los efectos del cambio climático. El estudio se publicó en la revista Geophysical Research Letters a principios de 2023, enfatizando la necesidad de exploración continua para evaluar las implicaciones ambientales.

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