Los volúmenes de PCI en hospitales de EE.UU. disminuyeron en 2022
Tras un aumento durante la pandemia de COVID-19, los volúmenes de procedimientos de intervención coronaria percutánea (PCI) en hospitales de EE.UU. cayeron aproximadamente un 5% en 2022 en comparación con el año anterior. Datos del Registro CathPCI del American College of Cardiology destacan esta tendencia, que refleja los desafíos continuos de recuperación en la atención cardiológica. Los expertos atribuyen la disminución a los efectos persistentes de la pandemia en los volúmenes de pacientes y los retrasos en procedimientos.
El Registro CathPCI del American College of Cardiology, que rastrea procedimientos de cardiología intervencionista en hospitales participantes de EE.UU., reportó una disminución notable en los volúmenes de PCI para 2022. Según el análisis del registro, el total de procedimientos PCI cayó a aproximadamente 1.1 millones en 2022, desde 1.15 millones en 2021, una disminución de alrededor del 5%. Esto marca una reversión de la actividad elevada vista durante el pico de la pandemia de COVID-19 en 2020 y 2021, cuando los PCI de emergencia aumentaron debido a eventos cardíacos agudos en medio de interrupciones en la atención sanitaria.
Los datos del registro, que cubren más de 2.000 hospitales y representan alrededor del 90% de la actividad PCI en EE.UU., muestran que los PCI electivos no emergentes fueron los más afectados. Los volúmenes de estos procedimientos cayeron hasta un 8%, ya que los pacientes pospusieron la atención no urgente. En contraste, los PCI primarios para infarto de miocardio agudo se mantuvieron relativamente estables, disminuyendo solo un 2%. 'La pandemia creó un backlog de procedimientos, pero a medida que los hospitales se pusieron al día, vimos una normalización que tendió a la baja', dijo Deepak L. Bhatt, MD, MPH, director del programa de Innovación Cardiovascular de la ACC, en una declaración que acompaña el informe.
El contexto de fondo revela que los volúmenes de PCI aumentaron en 2020-2021 debido a una combinación de presentaciones demoradas que llevaron a casos más graves y aumentos temporales en la capacidad hospitalaria para la atención cardíaca. Sin embargo, para 2022, factores como la escasez de mano de obra, problemas en la cadena de suministro y la reticencia de los pacientes contribuyeron a la desaceleración. El informe nota variaciones regionales: los centros urbanos vieron una caída del 6%, mientras que los hospitales rurales experimentaron una disminución más leve del 3%, posiblemente debido a una menor acumulación de backlog.
Las implicaciones para la cardiología son significativas. La disminución plantea preocupaciones sobre el acceso a intervenciones oportunas, particularmente para casos electivos que previenen complicaciones futuras. Los funcionarios de la ACC enfatizan la necesidad de una inversión sostenida en infraestructura cardíaca para reconstruir los volúmenes. 'Aunque hemos superado las presiones pico de la pandemia, los datos subrayan la importancia de abordar las barreras en la atención', agregó Bhatt. No aparecen contradicciones mayores en los datos del registro, que se considera el estándar de oro para el seguimiento de PCI en EE.UU.
Esta tendencia se alinea con patrones más amplios de atención sanitaria post-COVID, donde los volúmenes de procedimientos en especialidades como la cardiología aún no han recuperado completamente los niveles prepandémicos de 2019, cuando los PCI anuales superaron los 1.2 millones.